Ecodetal - Puntadas que repagan algo más que ropa.
- ecodedal
- 4 jul
- 2 Min. de lectura

Hay quien cose por necesidad. Otros por tradición. Pero hay quienes, como Rita Bartolomé, lo hacen para transformar. Transformar telas en nuevas formas. Prendas olvidadas en piezas únicas. Y sobre todo, transformar una inquietud en acción.
Rita no llegó al emprendimiento buscando una salida, sino una causa. Su vida ya estaba llena: al frente de una oficina de Correos, con un equipo que coordina con eficacia y cercanía, y una familia que es su base y motor. Pero fue en medio de ese aparente equilibrio donde surgió una pregunta que no pudo ignorar: ¿Qué hacemos con todo lo que tiramos?
De la inquietud al taller
Un cambio de armario, un montón de ropa que ya no servía… y una decisión: no mirar hacia otro lado. Así fue como nació Ecodedal, una marca artesanal que rescata tejidos y los convierte en bolsos, mochilas, chaquetas, y mucho más. Cada creación es una pieza irrepetible, no solo por su diseño, sino por lo que representa: una segunda oportunidad, una forma diferente de consumir y de pensar.
Rita no solo reutiliza materiales, sino también miradas. Lo que para muchos es un desecho, para ella es una materia prima con historia. Ecodedal no sigue tendencias: las rehace. Y lo hace con el compromiso firme de reducir el impacto de la industria textil, una de las más contaminantes del planeta.
El valor de emprender con alma
Rita pertenece a esa generación que sabe lo que es trabajar duro, callar dudas y no esperar aplausos. Por eso, cuando decidió lanzar su proyecto después de los 50, no lo hizo para probar nada a nadie. Lo hizo porque sabía que era el momento. Porque el mundo necesita más voces con experiencia, más ideas con sentido, más manos que no se conformen.
Hoy, con cientos de creaciones a sus espaldas y un reconocimiento que llegó con los Premios +50 Emprende, Rita sigue con la misma humildad del primer día. Pero también con una certeza que ha ido creciendo: que cada hilo que cose, cose también una conciencia nueva.
Ecodedal no es solo moda. Es memoria, es sostenibilidad, es ejemplo.
Y Rita no es solo una emprendedora. Es una tejedora de cambio.




Comentarios